Del 25 al 28 de agosto los asistentes al XI Gran Salón Inmobiliario 2016, pudieron conocer y disfrutar de una vitrina completa de la oferta inmobiliaria en Colombia.
En cada uno de los pabellones los transeúntes jugaban al papel de inversionistas, curiosos preguntaban por todos los detalles de los proyectos que fueran de su interés. La oferta expuesta en la feria cumplía con los requisitos necesarios para todos los gustos y necesidades; hoteles, proyectos de vivienda a nivel nacional, inmuebles nuevos y usados, oficinas y unidades comerciales e industriales, lograron cumplir las expectativas de la diversa demanda del público.
En el salón de los proyectos internacionales y proyectos nuevos nacionales, se veían pequeños grupos de personas que debatían cuál era la mejor opción para hacer sus negocios; allí tomaban un rol más ejecutivo en donde proyectaban cuál sería el impacto de su inversión a futuro.
En el salón del usado el ambiente era diferente, cientos de personas buscaban asesoría personalizada de los bancos y del Fondo Nacional del Ahorro; mientras recibían atención, los grupos familiares interactuaban y analizaban sus posibilidades para hacer realidad el sueño de tener vivienda propia. En este espacio la oferta de inmuebles usados y remates, cautivaron a quienes buscaban una alternativa asequible para invertir en vivienda.
Por su parte, en el salón de los proyectos nuevos nacionales sobresalía el interés por estrenar y explorar nuevos escenarios. Las constructoras daban a conocer toda la oferta de inmuebles nuevos y los bancos exponían las maneras de obtener créditos y promovían las facilidades de acceder a la vivienda nueva mediante los Programas de Vivienda del Gobierno Nacional. En este espacio el protagonismo se lo llevaban las maquetas que recreaban la oferta de inmuebles nuevos, los curiosos imaginaban cómo sería su vida allí y hablaban de cómo esto transformaría su futuro.
LA GRAN APUESTA
Algunas constructoras dieron su toque novedoso al ofrecer un tour con gafas de realidad virtual por los proyectos, para que los visitantes se transportaran al lugar y sintieran la emoción de vivir allí. Quienes experimentaban esto afirmaban que era una manera de conocer el apartamento modelo de cada proyecto con una vista de 360°, ver al detalle los acabados del lugar y sentir como si estuvieran conociéndolo en persona. Sin duda alguna, esto fue una manera diferente que transportó a los asistentes.
Se generaron también espacios donde los niños se distraían en una pequeña simulación de escalada, sala de manualidades, pinturas y hasta mini juego de bolos, con la finalidad de que los adultos tuvieran el tiempo necesario para preguntar por los medios de financiación o los detalles de los proyectos seleccionados.
LO QUE OPINABA LA GENTE
Los asistentes concluían que para acceder a la vivienda propia se necesita de sacrificios y esfuerzos que valen la pena, pues la emoción de encontrar lo que tanto han buscado y conocer los métodos de financiación o los beneficios para acceder a los programas de vivienda, les permitía garantizar un mejor futuro.
El país crece en materia de vivienda, son cada vez más quienes pueden acceder a la vivienda propia y toman la decisión más importante de sus vidas, tomando riesgos y afirmando que sí es un buen momento para invertir. Actualmente existen muchas más posibilidades y facilidades para poder comprar y, por supuesto, en el Gran Salón Inmobiliario se encontraban precios para todos los gustos y necesidades, cautivando a los espectadores y apoyando la decisión de compra de una manera segura.
